Es posible que queden microorganismos (como bacterias) en la aguja después de cada uso del inyector de insulina. Si se reutiliza la misma aguja, las bacterias entrarán al cuerpo, aumentando el riesgo de infección. La infección puede causar enrojecimiento local, hinchazón y dolor. En casos graves, puede provocar celulitis o abscesos cutáneos.
Con la popularización de la inyección de insulina, cada vez más personas comienzan a prestar atención al uso y la seguridad de los inyectores de insulina. Garantizar que cada inyección sea segura y estéril es un concepto de salud importante. Sin embargo, algunas personas todavía optan por reutilizar las agujas para ahorrar dinero o tiempo. Este es un comportamiento muy peligroso.
Los microorganismos que queden en la aguja pueden ingresar al cuerpo. Una vez que las bacterias ingresan al cuerpo, comenzarán a multiplicarse y causar infecciones. Los síntomas más comunes de infección incluyen enrojecimiento local, hinchazón y dolor. Sin embargo, si son graves, estas bacterias también pueden provocar celulitis o abscesos cutáneos. La celulitis es una infección grave que puede causar enrojecimiento local significativo, hinchazón y dolor, y también puede ir acompañada de fiebre y escalofríos. El absceso cutáneo es un saco de pus formado por una infección del tejido local, que también puede causar enrojecimiento y dolor.
Reutilizar la misma aguja no sólo aumenta el riesgo de infección, sino que también puede afectar el efecto de la inyección de insulina. La aguja se desafilará durante el uso, lo que provocará dolor e incomodidad durante la inyección. Además, la reutilización de la aguja también puede provocar un flujo deficiente de insulina, lo que afecta la precisión y estabilidad de la administración del fármaco. Esto puede reducir el efecto de la inyección de insulina y provocar un control deficiente del azúcar en sangre en pacientes diabéticos.
Para evitar infecciones y otros efectos adversos, se debe utilizar una aguja nueva y esterilizada cada vez que se utiliza un inyector de insulina. Esto significa usar una aguja a la vez y no reutilizarla. Por supuesto, esto también aumentará cierta carga económica, pero en comparación con las infecciones y las complicaciones, este costo vale la pena.
Hay algunas otras precauciones que se deben tomar antes de inyectarse insulina. Primero, lávese y séquese las manos antes de usar el inyector. En segundo lugar, al inyectarse insulina, elija el lugar de inyección adecuado y siga la técnica de inyección correcta. Además, asegúrese de que el inyector y otros equipos relacionados estén limpios y esterilizados para evitar cualquier infección y riesgo de bacterias o contaminantes.
Reutilizar los inyectores de insulina es un comportamiento muy peligroso que aumenta el riesgo de infección y complicaciones. Para garantizar la seguridad y eficacia de la inyección, debemos desarrollar el hábito de utilizar agujas nuevas y esterilizadas y no reutilizar la misma aguja. La salud es el bien más importante de las personas y deberíamos prestar más atención a la seguridad y esterilidad de la inyección de insulina para nuestra propia salud.